Hoy por hoy, hacer la diferencia es uno de los factores que garantizan no sólo nuestra sobrevivencia sino el mantenernos y crecer en el entorno profesional. De aquí que surge el concepto de “marca personal”. Esto implica dejar huella en un nivel personal y destacar sobre la multitud. Esto nos generará mayores oportunidades profesionales así como ocupar una posición importante en nuestros clientes.
Pensemos por ejemplo en “Lady Gaga”, “Oprah Winfrey”, “Obama” o “Salma Hayek”. Actualmente forman parte de la lista de las “marcas” más poderosas del mundo. Tal vez para algunas personas suene fuerte hablar de marcas cuando nos referimos a las personas, sin embargo, el objetivo de esto es comprender los beneficios que esto representa.
La intención es sobresalir en un mercado donde hay más egresados y profesionistas que empleos. Asimismo, vender nuestros productos o servicios con más efectividad que nuestra competencia. En resumen, esta estrategia personal nos ayudará a vendernos mejor.
Para ello, te planteo un plan personal que tiene la finalidad de sentar un precedente y establecer las bases para generar una estrategia integral y así posicionarnos óptimamente.
Establecer un Objetivo Profesional
Sino tenemos un objetivo definido, difícilmente nuestro camino profesional tomará un rumbo claro. Identificar qué queremos lograr será fundamental para llegar a una estrategia de posicionamiento.
Visualiza cómo quieres verte en uno o dos años. ¿En dónde quieres estar? ¿Qué puesto te gustaría lograr? ¿Con quién estás? ¿Cómo te sientes? ¿Hacia dónde vas?
Identifica lo que te Hace Sobresalir, Ser Único
Pregúntate, ¿Qué te hace diferente de las demás personas de tu giro o actividad? ¿Por qué tendrían que escogerte a ti de entre la competencia? ¿Qué resultados generas que te distinguen de otros? ¿Qué preparación te puede hacer sobresalir?
Analiza tus Fortalezas y Debilidades
Ocupar una posición fuerte e importante en el ámbito profesional requiere de una buena dosis de autoconocimiento. Detectar tus fortalezas y tus debilidades te ayudará para saber en qué eres bueno, así como qué puedes y debes mejorar.
Estudia a tu Competencia
Saber quiénes son tus competidores, tanto directos como indirectos es sano y necesario. ¿Qué tipo de características tienen? ¿Cómo se posicionan en el mercado? ¿Por qué los prefieren en un momento dado con respecto a ti? Mantén tus ojos abiertos y obsérvalos, te ayudará a crecer y a desarrollarte.
Enfócate a tu Mercado Meta
Detecta quién es tu mercado meta. Una vez que lo estableciste, dirígete a conocerlos a fondo. ¿Quiénes son? ¿Cómo funcionan? ¿Qué necesidades tienen? ¿Qué estilo de vida siguen? La finalidad será satisfacer óptimamente lo que están buscando de tus servicios.
El concepto de vernos como una marca requiere, indiscutiblemente, de un cambio de mentalidad. Normalmente estamos muy ocupados con cientos de actividades. ¿Crees que valga la pena invertir un poco de tiempo para definir tu estrategia profesional en un mercado competido y cambiante?
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