Generalmente las mujeres nos maquillamos de acuerdo a lo que nos enseñó algún familiar, amiga o, tal vez, a lo que vimos en alguna serie. No es muy común tomar cursos especializados para aprender a maquillarnos correctamente, y mucho menos, un tipo de maquillaje acorde a nuestra edad. 

Si somos constantes en nuestra rutina de belleza, llevamos una vida equilibrada, no fumamos, tomamos agua, controlamos nuestro estrés, no nos desvelamos y hacemos ejercicio, seguramente luciremos mejor que si hacemos lo contrario.

A continuación, te presento una descripción por rango de edad en la que está descrito lo que va sucediendo con la piel conforme envejecemos. 

Entre los 20 y los 30 

Círculos oscuros debajo de los ojos

Primeras líneas de expresión en la frente

Entre los 30 y los 40 

Aparición de arrugas en el entrecejo

Microcirculación del rostro desciende 

Crecimiento de bello en barbilla y bigote

Entre los 40 y los 50

Los párpados comienzan a colgarse

Arrugas debajo de los ojos

Bolsas en los ojos

La arruga en el entrecejo se vuelve más profunda

Entre los 50 y los 60

Se marcan las “patas de gallo”

Aparición de Manchas en rostro

Se acentúan líneas de expresión a los lados de nariz y labios

Entre los 60 y los 70

Se pierde la firmeza del contorno del rostro 

Pequeñas arrugas alrededor de labios

Ya que tenemos claro lo que sucede en nuestra piel conforme a la edad, te dejo unas recomendaciones que podrás adaptar para sacar el mayor beneficio de tu maquillaje y, por ende, de la imagen que proyectes. 

Bases de la piel

  • Las pieles jóvenes requieren de menos cobertura y bases líquidas -o maquillaje- sin aceite.
  • Las más maduras y secas requieren de bases hidratantes. Una piel con tono uniforme parece más joven.

Sombras

  • Al usar las sombras en unos ojos maduros despeja la zona sujetando la ceja hacia arriba. La sombra llegará así a todo el párpado, y no sólo a la parte visible.
  • Recurre a sombras en colores neutros como el gris, marrón y el rosa. Las estridentes como, por ejemplo, las azules, lilas o verdes, son recomendables para pieles jóvenes. 
  • Evita sombras nacaradas ya que penetra en las arrugas y las acentúa. Busca sombras mate y de larga duración. Las sombras mate y claras realzan y amplían la zona ocular, mientras que las brillantes resaltan la piel flácida.
  • Prefiere pinceles para aplicar sombras a los aplicadores de esponja. Los aplicadores arrastran la piel y acentúan las arrugas. 

Delineadores

  • Evita los delineadores líquidos: cuanto más flácida se vuelve la piel, más cuesta aplicarlos. Elige los lápices o las sombras en polvo y aplícalas con un pincel de sombras, más suave y fino.

Labios y rubor

  • Con la edad, la piel pierde el poder de conservar la humedad, y los labios se tornan más finos y pálidos. El lápiz es esencial en pieles maduras; crea una barrera cerosa que mantiene el labial en su sitio y evita que se corra o gotee en las comisuras. 
  • Al paso del tiempo, nuestro color natural se matiza: la viveza de los labios se apaga y la piel luce menos. Si tienes una tonalidad muy suave o discreta, parecerá que te has desteñido. Por ello, usa una cantidad suficiente de rubor y labial
  • El rubor es el producto más eficaz para las pieles maduras. Restaura el cutis, matiza las arrugas, disimula la flacidez y aporta un brillo juvenil. Te quita años de encima al momento y te da un aspecto más saludable.

¿Quieres saber más al respecto? Contáctame vía correo contacto@agencia-alterego.com o vía WhatsApp al 221 206 37 01

Scroll to Top